Cómo hacer un rascador de gato fácil

Si necesitas un rascador de gato y eres más o menos manitas (no hace falta ser un experto en bricolaje) puedes hacer tu propio rascador para gatos con algunos materiales sencillos y baratos:

• Madera
• Paño de cocina
• Tela decorativa
• Grapas o chinchetas para tapizar
• Cuerda

Si seguís las instrucciones paso a paso os quedaría un rascador como el de la foto, pero si usáis vuestra creatividad seguro que podéis personalizarlo con las formas, colores y tamaños que más os gusten.

Si hacéis vuestro propio rascador estaréis protegiendo vuestros muebles de los arañazos de vuestro gato. Lo mejor de hacerlo uno mismo es que es muy barato ya que la mayoría de los materiales y herramientas que necesitamos suelen estar en nuestras casas o tienen un precio realmente asequible.

Las características de los materiales que tenéis que preparar son las siguientes:

• Una tabla de madera de unos 45 cm x 12 cm aproximadamente.
• Un paño de cocina viejo de tamaño suficiente como para envolver la madera.
• Una pistola de grapas o chinchetas de las que se utilizan para tapizar.
• Un martillo.
• Un trozo de tela para envolver la madera y el paño.
• Un rollo de cuerda grueso de fibra vegetal, esparto, sisal…

Envolvemos la madera con el paño de cocina viejo, será el acolchado para que quede mullido y a la vez evita que el gato pueda llegar a clavar las uñas en el núcleo de madera.

Una vez hayamos envuelto la madera con el paño de cocina o similar, clavaremos unas grapas para que quede perfectamente fijado (con cuidado de que no puedan soltarse). Si no disponemos de una grapadora tan potente podemos optar por unas chinchetas de las que se utilizan en los trabajos de tapicería, que darán un aspecto más refinado a la parte trasera de nuestro rascador. Las chinchetas pueden comprarse en las mercerías y tiendas de manualidades.

Después cubriremos todo con la tela decorativa que hayamos escogido. Volvemos a repetir el proceso fijándola a la madera con las grapas o chinchetas de tapizar. Para la parte exterior podemos optar incluso por unas chinchetas más decorativas porque esas serán las que se vean en caso de darle la vuelta al rascador.

Como puede que en algunas zonas ya haya una capa de telas considerable tal vez nos tengamos que ayudar del martillo para clavar bien algunas grapas.

Para recubrir con cuerda, fijaremos un extremo de la cuerda por la parte trasera de la tabla y comenzamos a envolver cuerda alrededor del núcleo de madera, tal como se aprecia en la foto a continuación.

Cuando lleguemos al otro extremo de la tabla fijaremos la cuerda a la madera con unas grapas o chinchetas.

Ya tenemos el rascador listo. Ahora sólo debemos tener en cuenta una cosa más. Debemos fijarnos en las preferencias de nuestro gato. Si prefiere rascar en superficies horizontales (tipo alfombras, moquetas, etc) ya habremos finalizado y estará listo para usar. Si por el contrario es un gato que prefiere rascar en vertical, os recomendaría que lo enganchéis a la pared. Esto puede hacerse con unos cáncamos y puntillas o alcayatas, como si pusierais un cuadro en la pared. !Ahora sí estará listo!

Vía: Guía de manualidades