Estamos acostumbrados a ver a nuestros gatos asearse y después vomitar las bolas de pelo. Pero ¿Qué pasa si las bolas de pelo no se eliminan correctamente? Pues que puede haber complicaciones. Y eso es lo que le ha ocurrido a Ty.
Bueno, sí, debemos tener en cuenta que Ty no es exactamente un gato sino un tigre de 180 kg y 17 años de edad. Y que la bola de pelo era del tamaño aproximado de un balón de baloncesto. Según explica el diario Daily Mail Ty comenzó a perder el apetito dos semanas antes de la operación, en lugar de comer su ración diaria de 7 Kg de carne comía solo 2 kg.
Después de unos exámenes médicos para determinar qué le ocurría a Ty, rayos X, ultrasonidos y finalmente una endoscopia, los veterinarios encontraron la bola de pelo, del tamaño aproximado de un balón de baloncesto y un peso de 1,8 kg, en el interior del estómago del tigre. La determinación de los veterinarios fue realizar una intervención quirúrgica gracias a la cual se extrajo la bola de pelo con eficacia y seguridad para el tigre, que se recuperará por completo tras la intervención.
Ty, un gato grande
Durante la operación y cogiendo la «patita» de Ty se encontraba también Vernon Yates, dueño del tigre y representante de la ONG. Vernon ha declarado que está muy contento por el éxito de la operación y ha añadido «Él es como mi gran bebé, mi niño. Este tigre significa para mi más que cualquier otro animal».